El Mito de Sísifo según la Economía
por Ecostófanes o Mono Economista
La economía ciega (tanto teórica como prácticamente) viene cargando una roca inmensa sobre su espalda (cuyo peso proviene: teóricamente del agobio que siente por demostrarse que tiene la verdad en sus manos y prácticamente por la angustia de conseguir el mayor crecimiento posible) a lo largo de una extensa colina, y justo cuando cree llegar a la cima viene la caída, pierde la piedra y la ve rodar hasta las faldas de la sierra. Una fuerza extraña, como venida de los Dioses le arrebata su victoria, sobreviene la crisis económica y la crisis teórica. Pero esto no la doblega, ella no sucumbe ante tales golpes, recobra bríos (surge alguna nueva teoría, como la Keynesiana o Neoliberal y se vuelve a creer que tan solo ha sido efecto del errar humano, las expectativas mercantiles mejoran después de toda la destrucción ocasionada en los empleos, satisfacciones, vidas, etc.) y obstinada vuelve a levantar la roca para continuar infinitamente su marcha. No nada más la economía ha sido incapaz de lograr uno de sus objetivos: acabar con la pobreza material, sino que la ha incrementado; no nada más la economía ha sido incapaz de explicarse teóricamente su ruina, sino que se ha obcecado y ha dejado de ser ciencia para convertirse en dogma.
¡Oh Economía sísifica! Habéis engañado a la muerte, lo habéis hecho durante muchos años y lo seguiréis haciendo durante muchos más. Pero no os creáis inmortal, que en este mundo ni lo divino es eterno y un día, por más que intentes escapar, tu astucia no te será suficiente y tendrás que enfrentarte al destino que tú misma te has construido.