lunes, 23 de mayo de 2011

¿México va por la senda del crecimiento?


Liliana Padilla

Si hemos prestado atención a las declaraciones vertidas por el gobierno de la república, sus funcionarios y el presidente, podemos decir sin temor a equivocarnos que todas lo declarado por ellos apunta hacia un mismo objetivo: decir que México va mejorando.  
Pero como dice el proverbio “del dicho al hecho hay un largo trecho”, en 10 años en el poder del PAN (Partido Acción Nacional), los resultados son inevitablemente palpables: hay más pobreza, más desigualdad, menos crecimiento económico. Por eso extraña que recientemente el Presidente Felipe Calderón Hinojosa declarara “se ha superado la adversidad y el país ha vuelto a la senda del crecimiento”


La CEPAL es una de las cinco comisiones regionales de las Naciones Unidas y su sede está en Santiago de Chile. Se fundó para contribuir al desarrollo económico de América Latina, coordinar las acciones encaminadas a su promoción y reforzar las relaciones económicas de los países entre sí y con las demás naciones del mundo. Posteriormente, su labor se amplió a los países del Caribe y se incorporó el objetivo de promover el desarrollo social. Pues bien este organismo junto con la UNICEF, hace muy poco tiempo, realizaron un estudio de pobreza en América Latina, pero los datos arrojados, indican cosas verdaderamente apocalípticas, la miseria afecta a 81 millones de niños en América Latina, casi la mitad de los menores de 18 años de la región. En Brasil y México, las mayores economías de la región, cuatro de cada diez niños viven en pobreza, aunque las cifras suben en las zonas rurales, donde hay comunidades altamente precarizadas. La crisis de la infancia, que presenta tasas de pobreza superiores al promedio general de la población de un 33 por ciento, es bastante desigual al interior de los países.

"En las zonas rurales, tres de cada cuatro niños viven en pobreza, mientras que en las zonas urbanas solo uno de cada tres está en esta situación", indicaron Cepal y Unicef.
La gravedad de la situación es tal que hoy unos 13 millones de niños ni siquiera pueden acceder a una alimentación adecuada, en un subcontinente que produce más nutrientes de los que necesita.



La cifra indica que casi la mitad de los pobres latinoamericanos son niños y que la mitad de los futuros ciudadanos habrá vivido su infancia en pobreza.

Espelúznate, pongámonos a reflexionar, si es cierto, o no que vamos por la senda del crecimiento como dice el presidente, yo solo digo que el futuro del país es un futuro de desolación, pues el 40% de los niños mexicanos no pueden ni siquiera comer, entonces ¿Cómo es que caminamos hacia el crecimiento? Los niños mexicanos son el futuro del país, y si ni siquiera pueden alimentarse ¿Podrán  estudiar, educarse, estar físicamente sanos?, por eso aunque es, no es de extrañarse que en esta situación los niños se ven en la necesidad de convertirse en las huestes del narcotráfico. La mejor lucha a futuro que se tiene para combatir a los cárteles de la droga, es no dándoles un campo abierto para que puedan tener nuevos esbirros. El futuro de la patria esta en peligro, no se puede cambiar la realidad con palabras, por que la realidad es independiente de la conciencia del hombre, y la realidad (aunque suene muy alarmista), es que el país camina hacia la desolación. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario