lunes, 2 de mayo de 2011

Un mundo para reflexionar


Lunatica Lobegood
En México como en el mundo estamos viviendo una serie  de cambios importantes en diversos aspectos. Lo que tanto caos ha ocasionado es el hecho de una mala organización así como una gran corrupción.  México en estos últimos 200 años  ha tenido cambios importantes  en cuestión política, pero todos ellos se han visto abatidos por las transformaciones que todo el orbe ha vivido.  En la actualidad, hay un gran desbalance económico, así como un nuevo enfrentamiento  que  vincula mucho la ecología.
No hay que entrar en pugnas político-sociales (por el momento), sino que el punto es confrontar solo los aspectos políticos. Es para reflexionar por una parte, no sólo por el sentido político, sino que lo que realmente es relevante.  Un hecho es que  usan mucho de la calidez mexicana así como sus tradiciones para dar pautas a  nuevas leyes, como la “ley del empleo”, que más para mantener  la forma del ámbito laboral, asocia a sus propios intereses, de tal forma que ya no hay derechos del trabajador.  El “error” no es el sentido político o económico, sino social. Lo digo porque  las personas  viven en el miedo si  inmutarse, en el circo, en la información terrorista. No se hace nada y a vistas de otro país esto hubiera sido inadmisible, por eso digo  que es social. Por otra parte  se busca el beneficio propio o el simple hecho de no estar acostumbrados a relacionarnos a la misma cultura que  nos rodea o a la buena información.


Cárteles y muertes son solo explicables, como una cortina de humo que arroja mucha sangre, donde  gente inocente  está  “pagando”, es una  guerra que estaba  pérdida por diversas razones, una de las principales es porque el mismo gobierno está lleno de intereses generales,que lo llevan al abuso, y al unísono  se dirige con una doble moral, hipócrita incluso, hacia la sociedad entre que es lo correcto y lo que no.
Mientras que la sociedad mexicana  se ha  decepcionado por los resultados de sus gobernadores  si no hay interés público (Esto es indistinto de nivel socio –económico, puesto o lugar donde se viva), solamente estaremos hablando de que hay interés más que vivir al día, en las diversiones o en no tener problemas fuera de lo ordinario, convirtiendo así a nuestra sociedad mexicana en muy egoísta y solitaria, que no apoya  en sus ideales por miedo, falta de información y desconfianza.
Y lo peor es que los mismos jóvenes son los menos informados, no me voy lejos, a los mismos universitarios no les interesa, por diversas razones y al momento, que se llegue al campo de trabajo, cuando se logra ver por fin que la teoría en las aulas es muy distinta a la práctica de ganarse el día con día.
Al final seguimos  con el sentido social  igual sin importar  lo que venga a las futuras generaciones, un mundo para reflexionar podría llevar  a no solo una reflexión sino a todo en general de lo que sabemos y debemos hacer en consecuencia. ¿Qué es lo que realmente esperamos?  No me refiero a que se paren las tradiciones  o que no se tenga una moral, sino a que se busque el bien común, el valor común, un futuro en común. ¿Es demasiado idealista? Igual, pero lo más importante como difícil sería cambiar la forma de pensar de las personas de la ideología que actualmente nos rige.


El pensamiento es  uno de los elementos poderosos.  Del pensamiento nacieron esas ideas, pero de bases materiales, no se puede explicar el pensar por si mismo, son las circunstancias las determinantes. Reflexionar nos llevará a ver esas circunstancias reales que nos lleven a tomar decisiones.
El mundo va cambiando. La tecnología por ejemplo por la necesidad  del régimen capitalista, pero ha llegado la hora de buscar un nuevo sistema que nos rija, sin buscar un mayor beneficio porque entonces esto será lo mismo que salir  de un manicomio para llegar a un cementerio.



 

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